Chocolate negro: PX Sherry, Barolo Chinato, Oporto, Banyuls, algunos vinos tintos de frutas con alto contenido de ácido.
Chocolate con leche: Viognier, Alsace Pinot Gris, Tawny Port, vino espumoso Demi-Sec
Chocolate blanco: Riesling seco, rosado, estilos más ligeros de Pinot Noir
Es importante tener cuidado con la sobrecarga de taninos del chocolate negro y un vino tinto seco y con cuerpo, ya que pueden provocar amargor.
Los vinos con un poco de dulzura residual pueden ayudar a suavizar el amargor de los taninos en el chocolate negro, que a su vez tiene niveles relativamente bajos de azúcar.
Combinar comida y vino siempre es subjetivo en cierta medida, hay que pensar en el sabor, la acidez, el peso y la longitud del vino y cómo funciona esto, o no, con el intensidad, dulzura y textura del chocolate.
Es posible que antes de tener la mezcla perfecta tengan que “soportar” algunos experimentos de degustación.
Los vinos rojos con una acidez más fresca cuando se combinan con chocolate negro, suelen ser una combinación muy buena al paladar.
El chocolate blanco tiene una textura muy cremosa en el paladar, con un sabor suave, por lo que sugerimos moverse hacia un Riesling ligero y más dulce para refrescar el palada. El vino blanco también puede funcionar para el chocolate con leche.
El chocolate con leche se encuentra en algún lugar entre [chocolate negro y blanco], dependiendo de su concentración, y puede funcionar muy bien con vinos blancos más maduros con un pequeño toque de roble, como un Viognier o tal vez un Pinot Gris.
Tres cosas principales a considerar:
El tipo de chocolate: el blanco y el chocolate con leche son generalmente más fáciles de combinar que el oscuro.
¿El postre es caliente o frío? Los postres fríos suelen ser más amigables con el vino.
¿Qué otros ingredientes hay en el plato?
Sí, puede ser difícil encontrar un vino que combine con un fondant de chocolate fundido, pero hay muchos otros postres de chocolate, y chocolates solos, que pueden ser halagados por una buena combinación de vinos.
De hecho, es un consejo útil pensar en el tipo de fruta que podría funcionar con un tipo particular de chocolate y encontrar un vino que incluya esos sabores: chocolate negro y moscatel anaranjado, por ejemplo.
Postres más ligeros con vinos más ligeros.
En general, los vinos de postre más ligeros como Sauternes, Riesling y Moscato funcionan mejor con postres de chocolate más ligeros, y los más ricos como Tokaji y vinos fortificados con vinos más oscuros y densos.
