Todos los que hemos bebido vino alguna vez en la vida nos hemos encontrado con el sedimento que se suele generar en el fondo de los vasos o las botellas de vino. Si alguna vez te has preguntado de dónde viene el sedimento del vino, aquí te contamos todo sobre este fenómeno.
¿Qué son los sedimentos del vino?
El sedimento es el material sólido que aparece en el fondo de cualquier recipiente que contenga vino (llámese botella, tanque, barril o cualquiera que se te pueda ocurrir). Es una mezcla heterogénea que, en el principio del proceso de producción de vino proviene por los pedacitos que no pueden disolverse de la pulpa de las uvas y su piel. También puede incluir las semillas que se asientan. En etapas posteriores, también pueden generarse por polímeros que vienen de las sustancias que se agregan para aclarar este líquido.
¿Qué tan comunes son los sedimentos?
Los sedimentos no son realmente tan comunes, así que es posible que los encuentres muy pocas veces. Muchas veces son señal de que el vino lleva varios años en su botella (muchas veces esto es indicador de que el vino es viejo). Aunque hay quienes piensan que el sedimento es un error en la producción o señal de baja calidad, es todo lo contrario. Los sedimentos pueden dar información sobre el vino y sobre sus condiciones de producción, pero tampoco causan que su sabor sea mejor o en realidad cambie de manera considerable. Sin embargo, es bueno conocer sus orígenes para no juzgar erróneamente.