Estoy segura de que a absolutamente nadie le gusta, pero probablemente en algún momento te ha llegado a suceder que te dispones a degustar de un delicioso vino y para tú sorpresa sabe mal, no eres experto pero algo te dice que el proceso de elaboración de la bebida no estuvo del todo correcto, sin embargo las causas de un mal sabor son diversas, en ocasiones puede darse el caso de que el vino esté picado, por lo que puedes llegar a detectar un olor y un sabor a vinagre muy desagradable, esto se debe a una bacteria llamada “acetobacter” que se genera a partir de una filtración de oxigeno, esto también puede generar la perdida de acidez.
Otro defecto que pueden llegan a tener las producciones vinícolas son una falta de olor y sabor, esto llega a suceder por una levadura llamada “Micoderma Vini”, la cual suele parecer con mayor frecuencia en la sidra; Otra causa puede ser una baja concentración alcohólica. El corcho así mismo, es un elemento importante y fundamental para la formación de un buen vino, por lo que si éste se encuentra en malas condiciones de higiene y se infecta de alguna bacteria u hongo, habrá una mayor probabilidad de el sabor del vino se vuelva más amargo y que incluso huela a humedad ¡Terrible!
Para finalizar, cabe destacar que hay otros defectos son más desagradables que los anteriores como espuma anormal, sabor a huevo podrido y/o cristales blanquecinos, las causas de ello en general están relacionadas con un mal manejo durante el proceso de vinificación o de almacenamiento.
¿Qué te parece?
