MIERCOLES, 23 JULIO, 2025
Un evento que marca historia en la Ciudad de México
La Ciudad de México se convirtió en epicentro de la cultura vitivinícola nacional con la primera edición del Salón del Vino Mexicano, un evento que reunió a productores, sommeliers y amantes del vino en un espacio dedicado exclusivamente al vino hecho en México.
Celebrado en la simbólica Agrupación Leonesa y organizado en colaboración con la Escuela Mexicana de Sommeliers, este encuentro tuvo un propósito claro: exhibir, promover y conectar a través de experiencias sensoriales que resaltan la riqueza del vino mexicano.
Un homenaje previo al Día del Vino Mexicano
El Salón se llevó a cabo como parte de las celebraciones previas al Día del Vino Mexicano, conmemorado cada 7 de octubre, una fecha oficial que reconoce el esfuerzo de las bodegas, viticultores y comunidades que dan vida a esta industria en constante crecimiento.
Este evento no solo ofreció degustaciones y venta directa, sino que también abrió un nuevo capítulo en la promoción del vino nacional, consolidándose como una plataforma clave para fortalecer su presencia en el mercado y en la cultura mexicana.
Un salón con sabor a México
Más de 64 bodegas mexicanas se dieron cita, presentando más de 350 etiquetas que reflejan la riqueza, diversidad y carácter del vino nacional. Desde tintos robustos hasta blancos vibrantes, cada copa fue una invitación a descubrir el potencial de nuestras regiones vitivinícolas.
El ambiente fue único: sommeliers, restauranteros, distribuidores, periodistas y entusiastas del vino recorrieron los pasillos, compartiendo catas, aprendizajes y conversaciones que celebran el presente y futuro de la industria.
#EligeVinoMexicano: una campaña que une al país
El salón se integró a la campaña nacional #EligeVinoMexicano, una iniciativa que impulsa el consumo local y reconoce el trabajo de las bodegas que, con pasión y compromiso, han elevado la calidad del vino hecho en México.
Más que una etiqueta, esta campaña es un llamado a valorar el esfuerzo de comunidades rurales, enólogos y viticultores que dan vida a cada botella. Durante el evento, líderes del sector destacaron la importancia de fortalecer la identidad del vino mexicano como símbolo de orgullo cultural y gastronómico.
Un brindis por el futuro del vino nacional
La creación del Salón del Vino Mexicano marca un paso firme hacia un mercado interno más sólido, donde el consumidor mexicano reconoce y elige vinos producidos en su propio país.
El éxito de esta primera edición confirma lo que muchos ya percibían: el vino mexicano está conquistando paladares a pasos agigantados, rompiendo paradigmas y ocupando su lugar en el mundo con gran esfuerzo y trabajo.
