México es un país conocido por su rica tradición culinaria, pero en el Paella Fest 2023 de Freixenet, la atención se centró en un plato español icónico: la paella. Este evento, que tuvo lugar en su viñedo ubicado en Ezequiel Montes, Querétaro, se convirtió en un festín culinario y cultural que atrajo a los amantes de la comida y entusiastas de la cultura de todo el país.
Maestros paelleros de diferentes partes del país se unieron para crear una experiencia gastronómica única. Desde la paella valenciana tradicional hasta las versiones innovadoras con ingredientes mexicanos, los asistentes se encontraron con un abanico de sabores que deleitó sus paladares.
La creatividad también se hizo presente, con paellas que incorporaban ingredientes mexicanos como chiles, nopales y chiles poblanos. Estas fusiones de sabores demostraron que la paella es un lienzo culinario en constante evolución.
El triunfo se lo llevaron los chefs Jose Luis Escobar y Josefina González, del restaurante Zeru, con operaciones en la Ciudad de México y Miami. Los vencedores ahora tendrán la tarea de viajar a España para continuar concursando por la mejor Paella Valenciana del Mundo.
Los asistentes al Viñedo de Freixenet se sumergieron en una experiencia cultural única. El evento contó con una amplia programación de espectáculos que celebraban la cultura española y mexicana. Desde espectáculos de flamenco hasta danzas folklóricas mexicanas, la música y el baile llenaron el aire con energía y emoción.
Además de estas manifestaciones artísticas, los participantes también tuvieron la oportunidad de aprender sobre la historia y la tradición de la paella. Hubo demostraciones en vivo de la preparación de más de 15 estilos de paella, donde los chefs compartieron sus secretos y técnicas. Los amantes de la gastronomía pudieron apreciar de cerca el arte de cocinar esta deliciosa especialidad.
El ambiente festivo y acogedor del Paella Fest hizo que fuera un lugar perfecto para socializar y disfrutar con amigos y familiares. Las mesas al aire libre, decoradas con colores vivos y elementos tradicionales, crearon un ambiente auténtico que transportó a los asistentes directamente a España. La paella se convirtió en el nexo que unió a personas de diferentes culturas en un ambiente de camaradería.
Sin duda, se trató de un evento extraordinario que celebró su edición número 21. Los entusiastas del vino que presenciaron la elaboración de este tradicional platillo español se sumergieron en una experiencia cultural y enoturística única que continuará siendo un punto culminante en el calendario gastronómico y un referente de la cultura del vino en México en los años venideros.